La brutal represión que China articula en el Tíbet desde hace más de medio siglo, no ha logrado atenuar la tenacidad de estas mujeres. Por el contrario, ellas son la base fundamental de la resistencia frente al opresor, la argamasa que mantiene cohesionada a una sociedad que sufre la ocupación de un enemigo que se muestra capaz de aplicar los métodos más abominables para perpetuarse en el poder.
viernes, 9 de enero de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Así es, ni mas, ni menos.....
ResponderEliminarGracias por visitar mi blog
Bienvenida!!
;)